Mi vista estaba fija en el pasillo. Por él, la gente caminaba, algunos eran conocidos y a éstos saludaba; otros, caras familiares pero cuyos nombres no conocía, y cuyas personalidades nunca me habían sido descritas. Éste era mi único entretenimiento.
Siempre me ha dado curiosidad mirar a las personas que caminan; mientrás estáticas, a excepción de ser una chica bonita, no me interesan de igual manera: de hecho, lo más probable es que no me llamen la atención para nada. Es por ello que mi mirada estaba fija en el pasillo por donde la gente caminaba. Fueran en grupo o en solitario, cada vez que mi visión periférica captaba movimiento, mis ojos se movían para seguirlo, observarlo, analizarlo.
La gente que conocía traía en mi recuerdos, algunos gratos, otros no tanto, y estos recuerdos eran transmitidos en mi cabeza mientras los saludaba a la distancia. La gente que no concía también tenía un impacto sobre mí, tal vez recuerdos, o imaginaciones, o algo más; la mayoría eran olvidados en cuanto abandonaban mi campo de visión, o en cuanto mu visión periférica captaba algún nuevo movimiento.
Después de un rato me aburrí, así que saqué mi cuaderno y empecé a escribir. Soy un escritor, y a eso es a lo que me dedico, a escribir.
martes, 30 de noviembre de 2010
lunes, 29 de noviembre de 2010
El Juego del Comodín II
Es tiempo, he decidido, de compartir el resto del juego del comodín con ustedes, del libro "El Misterio del Solitario" de Jostein Gaarder. ¡Disfrútenlo!
La bebida centelleante paraliza los sentidos de Comodín. Comodín escupe la bebida mágica. Sin el suero de la mentira, el pequeño bufón piensa con más claridad. Tras 52 años, el nieto del náufrago llega al pueblo.
La verdad está en las cartas. El hijo del maestro vidriero se ha burlado de sus propias imaginaciones. Las imaginaciones se rebelan contra el maestro. El maestro morirá pronto y los enanos habrán sido sus asesinos.
La princesa del sol encuentra el camino al mar. La isla mágica se destruye desde dentro. Los enanos fracasan de nuevo.
El hijo del panadero logra escapar del cuento antes de que se desplome.
El bufón se escabulle tras unos sucios edificios del puerto. El hijo del panadero se refugia en las montañas y se establece en un recóndito pueblo. El panadero esconde los tesoros de la isla mágica. Lo que va a suceder está en las cartas.
El pueblo aloja al niño abandonado que ha perdido a su madre enferma. El panadero le da la bebida centelleante y le enseña los hermosos pecesillos. El chico se vuelve un viejo de pelo blanco, pero antes de morir llega un soldado infeliz del país del norte. el soldado guarda el secreto sobre la isla mágica.
El soldado no sabe que la muchacha rapada da a luz un hermoso niño. El niño tiene que huír al mar por ser hijo del enemigo. El marinero se casa con una hermosa mujer que le da un hijo varón antes de irse al país del sur para encontrarse a sí misma. Padre e hijo buscan a la hermosa mujer que no se encuentra a sí misma.
El enano de manos frías señala el camino al recóndito pueblo, y regala al niño del país del norte una lupa para el viaje. La lupa coincide con el trozo roto de la pecera. El pez de colores no revela el secreto de la isla, pero sí el panecillo. El hombre del panecillo es el soldado del país del norte.
La verdad sobre el abuelo está en las cartas. el destino es una serpiente tan hambrienta que se devora a sí misma. La cajita de dentro desembala a la de fuera, a la vez que la de fuera desembala la de dentro. El destino es una coliflor que crece por igual en todas las direcciones.
El niño se da cuenta de que el hombre del panecillo es su abuelo, a la vez que el hombre del panecillo comprende que el niño del país del norte es su nieto. El hombre del panecillo grita por un tubo mágico que alcanza gran distancia. El marinero escupe bebida fuerte. La mujer hermosa que no se ha encontrado a sí misma encuentra a su amado hijo.
El solitario es una maldición de familia. Siempre hay algún comodín que desenmascara el espejismo. Las generaciones se suceden, pero por el mundo viaja un bufón que nunca es devorado por el tiempo. El que va a descubrir el destino tiene que sobrevivirlo.
La bebida centelleante paraliza los sentidos de Comodín. Comodín escupe la bebida mágica. Sin el suero de la mentira, el pequeño bufón piensa con más claridad. Tras 52 años, el nieto del náufrago llega al pueblo.
La verdad está en las cartas. El hijo del maestro vidriero se ha burlado de sus propias imaginaciones. Las imaginaciones se rebelan contra el maestro. El maestro morirá pronto y los enanos habrán sido sus asesinos.
La princesa del sol encuentra el camino al mar. La isla mágica se destruye desde dentro. Los enanos fracasan de nuevo.
El hijo del panadero logra escapar del cuento antes de que se desplome.
El bufón se escabulle tras unos sucios edificios del puerto. El hijo del panadero se refugia en las montañas y se establece en un recóndito pueblo. El panadero esconde los tesoros de la isla mágica. Lo que va a suceder está en las cartas.
El pueblo aloja al niño abandonado que ha perdido a su madre enferma. El panadero le da la bebida centelleante y le enseña los hermosos pecesillos. El chico se vuelve un viejo de pelo blanco, pero antes de morir llega un soldado infeliz del país del norte. el soldado guarda el secreto sobre la isla mágica.
El soldado no sabe que la muchacha rapada da a luz un hermoso niño. El niño tiene que huír al mar por ser hijo del enemigo. El marinero se casa con una hermosa mujer que le da un hijo varón antes de irse al país del sur para encontrarse a sí misma. Padre e hijo buscan a la hermosa mujer que no se encuentra a sí misma.
El enano de manos frías señala el camino al recóndito pueblo, y regala al niño del país del norte una lupa para el viaje. La lupa coincide con el trozo roto de la pecera. El pez de colores no revela el secreto de la isla, pero sí el panecillo. El hombre del panecillo es el soldado del país del norte.
La verdad sobre el abuelo está en las cartas. el destino es una serpiente tan hambrienta que se devora a sí misma. La cajita de dentro desembala a la de fuera, a la vez que la de fuera desembala la de dentro. El destino es una coliflor que crece por igual en todas las direcciones.
El niño se da cuenta de que el hombre del panecillo es su abuelo, a la vez que el hombre del panecillo comprende que el niño del país del norte es su nieto. El hombre del panecillo grita por un tubo mágico que alcanza gran distancia. El marinero escupe bebida fuerte. La mujer hermosa que no se ha encontrado a sí misma encuentra a su amado hijo.
El solitario es una maldición de familia. Siempre hay algún comodín que desenmascara el espejismo. Las generaciones se suceden, pero por el mundo viaja un bufón que nunca es devorado por el tiempo. El que va a descubrir el destino tiene que sobrevivirlo.
domingo, 28 de noviembre de 2010
El Juego del Comodín
Todo aquel que me conoce sabe que cada vez que no encuentro el rumbo en mi vida hay una sola cosa que puede devolvérmelo, "El Misterio del Solitario" de Jostein Gaarder. Bueno, hoy no siento el rumbo, así que desempolvo mi amada copia y comparto con ustedes parte del juego del comodín que ahí viene:
Bergantín de plata naufraga en mar embravecido. El marinero es lanzado a la playa de una isla que crece y crece. El bolsillo de la camisa esconde una baraja que se pone a secar al sol. Las 53 imágenes serán la compañía del hijo del maestro vidriero durante muchos y largos años.
Antes de que palidezcan los colores, las 53 figuras se forjan en la imaginación del solitario marinero. Las extrañas figuras danzan en la conciencia del maestro.
Cuando el maestro duerme los enanos viven su propia vida. Un buen día, un rey y un jota escapan trepando de la cárcel de la conciencia.
Las imaginaciones abandonan el espacio creativo y entran al espacio creado. Las figuras salen de la manga del mago y se pellizcan en el aire para comprobar que están vivas. Las imaginaciones tienen un aspecto muy hermoso, pero todas menos una han perdido la razón. Sólo el comodín de la baraja desenmascara el espejismo.
Bergantín de plata naufraga en mar embravecido. El marinero es lanzado a la playa de una isla que crece y crece. El bolsillo de la camisa esconde una baraja que se pone a secar al sol. Las 53 imágenes serán la compañía del hijo del maestro vidriero durante muchos y largos años.
Antes de que palidezcan los colores, las 53 figuras se forjan en la imaginación del solitario marinero. Las extrañas figuras danzan en la conciencia del maestro.
Cuando el maestro duerme los enanos viven su propia vida. Un buen día, un rey y un jota escapan trepando de la cárcel de la conciencia.
Las imaginaciones abandonan el espacio creativo y entran al espacio creado. Las figuras salen de la manga del mago y se pellizcan en el aire para comprobar que están vivas. Las imaginaciones tienen un aspecto muy hermoso, pero todas menos una han perdido la razón. Sólo el comodín de la baraja desenmascara el espejismo.
sábado, 27 de noviembre de 2010
La trascendencia
Ayer me encontraba en una fiesta, y ahí que me puse a hablar con un amigo acerca de la escritura y de su importancia, y qué era lo que me motivaba a perseguir tan complicada carrera. Núnca había hablado con este amigo de esa manera, núnca había descubierto que tan buen debralle tiene, que tan buen argumento, me sentí como un dios cuando me halagó, me dijo que veía todo lo que yo le decía y se encontraba de acuerdo. Le dió la bienvenida a mi idea de la trascendencia, que al principio me aclaró que definiera, ya que estaba en la lista de motivaciones para perseguir a la escritura y hacer de ella mi amante eterna. Ah, esa idea de la trascendencia que tanto se ha discutido en Los Viajes a Filos, con el frito y a veces también con el doctor, aquella idea de mostrar algo de uno mismo, algo que de una manera u otra deje una huella y permita a los otros avanzar. Una idea para el ego, lo sé; es hermosa. La trascendencia, estirarse y tocar los corazones de una y muchas audiencias, un seguro contra la muerte y contra el olvido, se debe lograr poco a poco, de un corazón en uno al principio, y luego buscar más, simpere buscar más.
Y yo, ayer, conseguí un audiente más.
Y yo, ayer, conseguí un audiente más.
viernes, 26 de noviembre de 2010
La música del azar
La música del azar, como se llama un libro, pero si es musica, a mis oidos, a los tuyos. Es un volado, es decision aleatroria, y es hermosa. Una orquesta completa la interpreta, no de cámara sino una completa, de muchas piezas, incontables, de cientos de instrumentos, y el instrumento principal son las mil voces, ¿mil? no, un billón, muchas, muchas, que toman y se preguntan, qué les depara el futuro, determinado parcialmente por lo que ha ocurrido en el pasado, pero regido finalmente por el azar.
Ah, futuro incierto, futuro impredecible, la gente se pregunta sobre tí, y sus pensamientos forman parte de aquella canción, de aquella música. ¡Silencio! Si callas y atiendes la escucharás, es hermosa, es brillante, con un fondo de viento cambiante, y esas voces, esos pensamientos, en ellos está el mundo.
Es la música del azar.
Ah, futuro incierto, futuro impredecible, la gente se pregunta sobre tí, y sus pensamientos forman parte de aquella canción, de aquella música. ¡Silencio! Si callas y atiendes la escucharás, es hermosa, es brillante, con un fondo de viento cambiante, y esas voces, esos pensamientos, en ellos está el mundo.
Es la música del azar.
jueves, 25 de noviembre de 2010
Fritez
Yo friteo, tu friteas, él fritea, nosotros friteamos, ustedes fritean, ellos fritean.
Soy un frito, y estoy frito, y mi fritez llega a tal grado que es a pura determinación que avanzo, por el mundo, que llego a mi casa, que hablo, que le doy instrucciones al taxista, espera, eso de las instrucciones va antes de llegar a casa, "bo", qué puedo decir, estoy frito. Sigamos: llego a casa, abro la puerta, enciendo la luz, pero primero cruzo el departamento, y escribo, bueno, no del todo, primero hago otras cosas, de igual forma en la computadora, y luego escribo, si es que a esto se le puede llamar escritura. No lo sé, definitivamente es un debraye, aunque también es una narrativa. De repente me doy cuenta, pienso mucho y anoto poco, ¿qué pasaría si anoto todo lo que cruza por mi mente?
Perro, si eso esta ahí, con el lobo feroz que come margaritas, borrar, no, mi cuaderno, con los poemas de la mancha, ¿habrá una mancha en forma de perro? No se que digo pero mis dedos teclean furiosamente, olvido mucho, recuerdo mis deberes, examenes, escuela, que hacer, dominó, Harry's, si, diversión, con el frito y el doctor y el resto de la banda frita, de regreso a los deberes, debo aprender canciones, en el teclado, o sintetizador, si, eso, y en el piano, pero la vecina, se queja, no puedo practicar, no ahora, que es tarde, y no hay sueño, no puede ser, es tarde, mi mente da vueltas, regreso al perro, pienso que es azul, como el cielo, el mar y como Kirby si lo escojes de ese color en el Smash, pero prefiero escoger a Zelda, es más rápida, una vez siendo Sheik, claro está, como aquel tipo que siempre la usaba, que paliza nos metía a todos, a menos que nos uniéramos contra él, la unión, como el Manchester United, mi equipo, son rojos, como kirby si lo escoges de ese color, ¿de qué hablo? Kirby es rosado, y redondo, como un pokemon, pero más cagado. ¡Basta! ¡No más!
Uff, ¡qué debraye! Qué puedo decir, estoy frito.
Soy un frito, y estoy frito, y mi fritez llega a tal grado que es a pura determinación que avanzo, por el mundo, que llego a mi casa, que hablo, que le doy instrucciones al taxista, espera, eso de las instrucciones va antes de llegar a casa, "bo", qué puedo decir, estoy frito. Sigamos: llego a casa, abro la puerta, enciendo la luz, pero primero cruzo el departamento, y escribo, bueno, no del todo, primero hago otras cosas, de igual forma en la computadora, y luego escribo, si es que a esto se le puede llamar escritura. No lo sé, definitivamente es un debraye, aunque también es una narrativa. De repente me doy cuenta, pienso mucho y anoto poco, ¿qué pasaría si anoto todo lo que cruza por mi mente?
Perro, si eso esta ahí, con el lobo feroz que come margaritas, borrar, no, mi cuaderno, con los poemas de la mancha, ¿habrá una mancha en forma de perro? No se que digo pero mis dedos teclean furiosamente, olvido mucho, recuerdo mis deberes, examenes, escuela, que hacer, dominó, Harry's, si, diversión, con el frito y el doctor y el resto de la banda frita, de regreso a los deberes, debo aprender canciones, en el teclado, o sintetizador, si, eso, y en el piano, pero la vecina, se queja, no puedo practicar, no ahora, que es tarde, y no hay sueño, no puede ser, es tarde, mi mente da vueltas, regreso al perro, pienso que es azul, como el cielo, el mar y como Kirby si lo escojes de ese color en el Smash, pero prefiero escoger a Zelda, es más rápida, una vez siendo Sheik, claro está, como aquel tipo que siempre la usaba, que paliza nos metía a todos, a menos que nos uniéramos contra él, la unión, como el Manchester United, mi equipo, son rojos, como kirby si lo escoges de ese color, ¿de qué hablo? Kirby es rosado, y redondo, como un pokemon, pero más cagado. ¡Basta! ¡No más!
Uff, ¡qué debraye! Qué puedo decir, estoy frito.
miércoles, 24 de noviembre de 2010
Como un rayo
Veloz, como un rayo, mi mente corre así, va en fa, como dicen algunos, va corriendo. Los pensamientos se suceden unos a otros con velocidad y mi corazón palpita al mismo ritmo, desenfrenado, endemoniado. Mi mente da vueltas mientras mi cuerpo se reúsa a moverse, yace estático en el sillón, y mi corazon entra en taquicardia. Volteo a ver al reloj en la pared, aquel reloj que ya tiene algún tiempo conmigo, y parece estar roto: el segundero avanza muy despacio, y las otras dos manecillas no se mueven. El tiempo se ha frenado, o por lo menos así pareciera ser, y mi mente da vueltas y mis dedos escriben rápidamente. Veloz, como un rayo, mi mente corre así.
lunes, 22 de noviembre de 2010
Todo por una mancha
¡Qué vueltas da la vida! Un momento estas en un salón de clases, contestando un examen, y al siguiente una mancha, un borrón sobre el pizarrón, residuo de algún pensamiento del profesor en su clase anterior, te habla y te implora que le salves la vida.
¡Qué vueltas! Como aquella vez que ese mismo profesor no podía recordar sus pensamientos , y aquellos reclamos que le hacía a esa mente traicionera por ocultar el interior de ella. Al final el profesor salió triunfante, recordó el teorema y lo escribió, sólo para más tarde borrarlo y dejar, en su lugar, a la mancha.
¡Vueltas y más vueltas! La inspiración, la influencia de la mancha sobre mí, el impacto de haberla escuchado, el impacto una vez que fue borrada del todo. La necesidad de hacerle justicia, escribirle poemas y obituarios.
Todo por una mancha.
¡Qué vueltas! Como aquella vez que ese mismo profesor no podía recordar sus pensamientos , y aquellos reclamos que le hacía a esa mente traicionera por ocultar el interior de ella. Al final el profesor salió triunfante, recordó el teorema y lo escribió, sólo para más tarde borrarlo y dejar, en su lugar, a la mancha.
¡Vueltas y más vueltas! La inspiración, la influencia de la mancha sobre mí, el impacto de haberla escuchado, el impacto una vez que fue borrada del todo. La necesidad de hacerle justicia, escribirle poemas y obituarios.
Todo por una mancha.
sábado, 20 de noviembre de 2010
Media noche
Es tiempo, las manecillas del reloj apuntan a la media noche y es asì que sè que es el momento. La oscuridad afuera reina, el silencio es interrumpido solamente por un par de grillos, es de noche, es la media noche, es ahora, ha llegado. Las estrellas brillan en el cielo despejado, pero su brillantez es opacada por las luces de la ciudad, la luna redonda marca la fecha ademàs de la hora, hoy es el dìa, ha llegado. Un aullido se escucha a la distancia, asì es como comienza, con un lamento hacia la noche de una criatura cuyo rostro no puedo ver; a ese aullido se le unen otros tantos, una alabanza hacia la luna nueva, hacia el dia y hacia el momento. En seguida cae el silencio.
viernes, 19 de noviembre de 2010
Un Trabajo
El personaje se encuentra con un amigo en la calle, una mera casualidad que, sin embargo, no se hubiera dado de no ser ellos amigos. El amigo del personaje habla ràpidamente de lo que lo mantiene ocupado, y menciona una oportunidad, y al personaje le interesa èsta; no por necesidad propia, el personaje està bien establecido en aquello que llamamos vida laboral, pero sabe de un conocido, un cercano, a quien pordrìa beneficiar la oportunidad. Y es asì que yo obtengo un trabajo. Una casualidad en la calle, causada por muchos detalles desde la prominencia del personaje hasta aquel dìa, muchos dìas atras, años inclusive, que una amistad se forjò.
jueves, 18 de noviembre de 2010
Soy un filósofo errante
Hoy un amigo me pregunto, ¿qué acaso no somos todos filósofos errantes? y al principio no supe qué contestar, luego me di cuenta de que no, no somos todos filósofos errantes, para ello hay que estar concientes de que lo que expresamos es valioso, y buscar que dicha expresion refleje nuestro interior. Para ser filósofos errantes hay que ser hijos del movimiento, no permanecer estáticos, viajar, tanto mental como físicamente, estar siempre a la búsqueda de algo, de expresión, de debrayes. Para ser un filósofo errante hay que ser creativos, y hay que explorar la creatividad de los demás, y sobre todo, hay que estar despiertos ante el mundo, no dejar de sorprenderse por todo aquello que la vida presenta.
Es claro que no todos somo filósofos errantes, si ésta es su definición, la pregunta es, ¿tú eres uno? Porque yo, yo si.
Soy un filósofo errante.
Es claro que no todos somo filósofos errantes, si ésta es su definición, la pregunta es, ¿tú eres uno? Porque yo, yo si.
Soy un filósofo errante.
miércoles, 17 de noviembre de 2010
Soy el Tiempo
Hola, soy el Tiempo, así es, el Tiempo. Soy aquel al que le gusta marchar, simpre hacia adelante, con la vista orgullosa al frente. Nunca me verás retroceder; y esto te molesta, ¿no es así? Desearías poder hacerme dar marcha atrás, pero jamás sucederá; soy el Tiempo y simepre voy hacia adelante, soy muy terco, ¿sabes? Tus problemas no me importan porque yo estoy sobre todas las cosas, yo sólo avanzo, a eso me dedico, a avanzar.
A veces corro, otras veces camino despacio, una vez me torcí un tobillo, y no tuve opción más que parar, y conmigo se detuvo el mundo, trato que esto no ocurra a menudo, nunca se sabe que puede ocurrir.
Soy el Tiempo, y de momentos me aburro; no hago más que caminar. A veces me pregunto que es lo que he dejado desde que empecé a marchar, me pregunto cómo sería mi vida si no hubiera sido castigado por aquella pequeña explosión, si nunca la hubiera causado en el primer lugar. Bueno, supongo que no tiene importancia, pues estoy aqui y ahora, y no daré marcha atrás.
Soy el Tiempo, y no doy marcha atrás.
A veces corro, otras veces camino despacio, una vez me torcí un tobillo, y no tuve opción más que parar, y conmigo se detuvo el mundo, trato que esto no ocurra a menudo, nunca se sabe que puede ocurrir.
Soy el Tiempo, y de momentos me aburro; no hago más que caminar. A veces me pregunto que es lo que he dejado desde que empecé a marchar, me pregunto cómo sería mi vida si no hubiera sido castigado por aquella pequeña explosión, si nunca la hubiera causado en el primer lugar. Bueno, supongo que no tiene importancia, pues estoy aqui y ahora, y no daré marcha atrás.
Soy el Tiempo, y no doy marcha atrás.
lunes, 15 de noviembre de 2010
La Inmortalidad
Preguntas qué es la inmortalidad, y cómo se obtiene. Preguntas cuál es el camino, y búscas en mapas de tesoros la respuesta a tu mortalidad. Preguntas a los cielos, a los vientos, esperando que del aire surja la respuesta, preguntas a extraños, a los libros, pero no te preguntas a tí mismo. ¡Qué ciego estás! Tú que no ves la respuesta justo delante de tus narices, preguntas y preguntas, y te jactas de tu curiosidad, pero ésta no te lleva a ningún lado, y ésto porque no búscas la respuesta en tí mismo.
Deja de buscar bufandas de la inmortalidad, deja de escarbar por una fuente de la vida eterna, deja de creer en fantasías, que las fantasías son para crearse, para expresar aquello escondido en los confines de la mente, pero nunca son para creerse. ¡Despierta! Los sueños están bien para aquel que está dormido, o para aquel que busca de su vida una distracción, incluso están bien para encontrar en ellos deseos ocultos, no para vivir en ellos.
Búsca en tí, vamos, hazlo. Búsca en tus objetivos, en aquel camino que todas las noches planeas seguir pero nunca sigues, en aquel plan que tienes para darte a conocer, para ser alguien aún después de que la vida se te haya arrebatado; es ahí donde, con algún esfuerzo y con alguna suerte, es ahí que encontrarás la inmortalidad.
Deja de buscar bufandas de la inmortalidad, deja de escarbar por una fuente de la vida eterna, deja de creer en fantasías, que las fantasías son para crearse, para expresar aquello escondido en los confines de la mente, pero nunca son para creerse. ¡Despierta! Los sueños están bien para aquel que está dormido, o para aquel que busca de su vida una distracción, incluso están bien para encontrar en ellos deseos ocultos, no para vivir en ellos.
Búsca en tí, vamos, hazlo. Búsca en tus objetivos, en aquel camino que todas las noches planeas seguir pero nunca sigues, en aquel plan que tienes para darte a conocer, para ser alguien aún después de que la vida se te haya arrebatado; es ahí donde, con algún esfuerzo y con alguna suerte, es ahí que encontrarás la inmortalidad.
domingo, 14 de noviembre de 2010
El Caos es Orden
Una noche como cualquier otra, el departamento era un caos, y su único habitante disfrutaba de él. A su alcance se encontraba todo, ahí justo donde recordaba que había visto el objeto deseado por última vez. Tal vez no era muy estético, pero no se podía negar su practicidad, ni la familiaridad que en él inspiraba tener un departamento ordenado bajo su influencia.
Y entonces llegaron los visitantes, aquellos de lentes para mejorar su vision y ropas de adultos, y en seguida empezaron a imponer su propio orden sobre el departamento, acomodando todo a su idea de estética y de comodidad, preguntando mientras lo hacían: como puedes vivir así? Nunca pensando en lo que él quería, nunca considerando que aquel desorden era en realidad una manera de tener fácil acceso a todo, nunca dándose cuenta de que aque caos estaba lejos, muy lejos, de la suciedad.
Esto ya no sirve, decían los visitantes, arrojándo todo objeto que alzaban ante sus anteojos a una bolsa de basura negra, esto tampoco. Y él observaba horrorizado mientras su mundo, su caos, se iba degenerando a un caos mayor. Días después él buscaría su bufanda favorita y no la encontraría, de la misma forma que su cuaderno de escritos se convertiría en objeto perdido en aquel orden impuesto.
Basta! gritó él, basta, que no ven que el caos es orden?
Basta, no alteren más mi harmonía, continuó gritando.
Y los visitantes se detuvieron.
Y entonces llegaron los visitantes, aquellos de lentes para mejorar su vision y ropas de adultos, y en seguida empezaron a imponer su propio orden sobre el departamento, acomodando todo a su idea de estética y de comodidad, preguntando mientras lo hacían: como puedes vivir así? Nunca pensando en lo que él quería, nunca considerando que aquel desorden era en realidad una manera de tener fácil acceso a todo, nunca dándose cuenta de que aque caos estaba lejos, muy lejos, de la suciedad.
Esto ya no sirve, decían los visitantes, arrojándo todo objeto que alzaban ante sus anteojos a una bolsa de basura negra, esto tampoco. Y él observaba horrorizado mientras su mundo, su caos, se iba degenerando a un caos mayor. Días después él buscaría su bufanda favorita y no la encontraría, de la misma forma que su cuaderno de escritos se convertiría en objeto perdido en aquel orden impuesto.
Basta! gritó él, basta, que no ven que el caos es orden?
Basta, no alteren más mi harmonía, continuó gritando.
Y los visitantes se detuvieron.
viernes, 12 de noviembre de 2010
Salen a la luz
Los filósofos errantes salen a la luz, salen de sus madrigueras a la vez que se va poniendo el sol y el frío comienza su reino; uno primero y luego otro, sólo dos se atreven al principio, sólo dos oyen el llamado, aquel grito en su interior que les dice: es tiempo, es hora de salir a la luz. Y así es que salen estos dos personajes, y esperan, aguardan a otros que los sigan, que salten detrás de ellos, que abandonen el anonimato y tomen el siguiente paso que un filósofo errante debe tomar.
Los filósofos errantes salen a la luz, poco a poco, con el objetivo de expresar. Los filósofos errantes toman el siguiente paso, y agregan al ritual de Los Viajes a Filos un nuevo elemento, el de la escritura en la red; los filósofos errantes avanzan implacables, se alzan como debieron hace mucho tiempo, salen a la luz.
Los filósofos errantes salen a la luz, poco a poco, con el objetivo de expresar. Los filósofos errantes toman el siguiente paso, y agregan al ritual de Los Viajes a Filos un nuevo elemento, el de la escritura en la red; los filósofos errantes avanzan implacables, se alzan como debieron hace mucho tiempo, salen a la luz.
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